La raíz de los problemas: Articulo publicado en la revista "Bicicleta"

Son bastantes los militantes de la CNT desmoralizados, hartos 6 indecisos ante los problemas y discusiones internas de los últimos meses, especialmente agudizados en algunas federaciones locales. El hecho de que los debates y polémicas se vengan prolongando y adquiriendo no pocas veces caracteres borrascosos, supone el desgaste de mucha militancia, aunque tambien constata que, a pesar de todo, nos encontramos en una organización libertaria donde el debate interno no se soluciona o no puede solucionarse, como en otras organizaciones con decretos dede arriba.

Por otra parte, muchas veces las ramas 6 los primeros arboles, no nos dejan ver el bosque. Llevados por nuestro enfrentamiento cotidiano, nuestros problemas locales 6 los curiosos ejemplares burocráticos que tenemos delante, no alcanzamos a ver que en conjunto, y tal vez milagrosamente, el balance de la CNT actual sigue siendo positivo a pesar de todo. Son muchas más los locales donde la gente funciona bien, que las que están en crisis permanente. Son muchos más los militantes honrados que los burocrátas 6 los manipuladores. Objetivamente la CNT sigue siendo la única alternativa libertaria del movimiento obrero, o lo que es igual, la única alternativa autonóma con algún peso para luchar por una autogestión revolucionaria. Si hay otra y va por delante de la CNT que me lo digan y me apunto (porque -digamoslo abiertamente- la organización no es un fin en si mismo, sino un medio para lograr una serie de objetivos 6 generar una dinámica 6 unas situaciones determinadas).

Todo esto no quiere decir que predique ningún tipo de optimismo 6 alcance de forma clarividente la solución de los problemas confederales. Quede claro.

Como primer paso, propondría una correcta ubicación de los mencionados problemas como única forma de situarse en el camino de su solución. Que se me perdone el esquematismo de las descripciones, es una forma de ahorrar folios, espacio y paliza al compañero-lector.

Falsas formas de abordar los problemas de la CNT

1.- Desencanto de los despistados. Asistimos, junto al cansancio de excelentes compañeros de diversas procedencias y maneras de pensar, a un cierto desencanto de algunos cenetistas o ex que, no pocas veces, salen despotricando a toda leche, afírmandose rápidamente como banderin de enganche para la verdadera, la inimitable, la nueva organización libertaria por antonomasia, de la que CNT es obstáculo máximo a derribar para bien de todos y de la causa. Son por ejemplo:

a) Los que esperaban encontrar aquí la soñada "organización de masas" de la que se vanguardia esclarecida. De forma más o menos confesada, con ropajes más o menos antiautoritarios, muchos de forma consciente o inconsciente se plantearon así la entrada en CNT. En esta liza, o se ven despreciados por la militancia, o derrotados por otros "vanguardistas" con más habilidad, sellos, "legitimidad" etc. Desgraciadamente muchos de estos no se dan por vencidos y siguen dentro, con la esperanza de que llegue el momento en que la CNT necesite su mano firme y su pulso no temblará.

b) Los que esperaban encontrar en la CNT una balse de aceite, una especie de cofradia solemne de relaciones versallescas, contactos personales perfectos, buenos amigos etc. Ante los primeros enfrentamientos, ante plenos de alta tensión, salen "quemados": ,,aquí no hay libertarios". Es indudable la importancia de un buen ambiente, buena armonia, o incluso relaciones privadas de amistad. Favorecen la acción y el ánimo del militante que bastante tensión y violencia tiene en la fábrica, en el barrio 6 en la familia. Pero también es lógico que en una organización donde, en principio, puede entrar cualquier trabajador, se vé todo tipo de gente, los que nos caen simpáticos y los que no, los mas puros y los que tienen ramalazos poco libertarios. Es lógico también el enfrentamiento y la critica, siempre que no se intente resolverlo con el anatema o la violencia. De eso habrá siempre.

c) Quien creyó hallar en la CNT la gran ocasión histórica de acelerar las contradicciones y llegar a una revolución inmediata, libertaría, única e inédita en el mundo, y protagonizada por la organización confedera¡. También los hay. Y están logicamente defraudados de que la cosa sea tan lenta. De que se haya ido mas de un año en tratar de salir a la luz y ganarnos simplemente el derecho a existir. Hay que partir de que la gente está alienada, y en muchísimos casos moralmente corrompida tras los conocidos cuarenta últimos años, y que todo protagonismo (personal o de organización) debe ser rechazado de antemano. Y que además es absurdo esperar que se planteen las cosas con la rotundidad y eficacia a corto plazo de cuando éramos dos millones.

d) Quien esperaba encontrar en la CNT apoyatura para todo proyecto contracultura¡ o provocador ante el que todo el mundo se iba a quedar boquiabierto, o seguir docilmente. Son los eternos repetidores de un "mayo 68", que, ignorado ya por los más jovenes, no pedía precisamente mímesis sino creatividad. No traslado de slogans a miles de kilómetros y lustros de distancia sino una actitud personal que fuera capaz de acabar con las codificaciones y modelos. Muchos de estos amigos siguen incansables, aportando lo que pueden. Se les respeta. Otros, han salido despavoridos o se han cogido a frases o anécdotas para desquitarse de una incompresión que podría haber sido sólo, cuestión de un poco de tiempo y menos narcisismo. Les hemos visto mirando por encima del hombro al compañero que no estaba a su altura, simplemente no entendía, 0 empleaba términos contaminados. Luego este compañero tan burro ha sido capaz de llevar hasta el final sus cuatro ideas y plantar cara al sistema, mientras el cotracultural se decidía entre los situacionistas o la última 2.-Maniqueísmos. La culpa la tiene la FAI, la burócrata tal o la exiliada cual. Son las ramas que con mas frecuencia ocultan el bosque de los problemas confederales. Cierto que hay un grave problema de burocratización teledirigida, pero éste, siendo quizá el más urgente, no es ni mucho menos el más grave o dificil de solucionar, como trataremos de razonar.

3- El llamado problema generacional. Es cuestión de "viejas momias", esto es "un cadáver", etc. Pues bien, yo he visto a tíos jóvenes y bien jóvenes actuar corno burocrátas, blandir normar y organizidades, declarar anatemas o decretar expulsiones, como a ningún viejo militante. Y he visto por el contrario, a compañeros veteranos estar en la brecha sin tratar de dirigir nada, barrer el local o escuchar a todo el mundo, estar al día y vivir con las ideas cotidianamente, avanzar en los aspectos más actuales de la lucha como la ecologia revolucionaria, ete. ¿No será que el problema de el poder no tiene edad?

Esbozadas algunas de las que, a mi modo de ver, son falsas vías para solucionar los problemas o simplemente abordarlos, trataré, en contrapartida, de apuntar algunos de los que creo motivos reales de lo que se ha llamado crisis de la CNT. Quede claro que se trata de una reflexión personal que publico como propuesta para el debate en marcha, sin tratar de convencer a nadie ni recomendar ninguna postura concreta. Me parecen buenas todas las que esten movidas por móviles de sinceridad y honradez.

Antes de seguir, una pequeña disgresión. No existe ninguna organización perfecta en una sociedad como ésta. Toda organización es un conjunto de personas que arrastran una serie de taras personales desde la infancia. De eso está hecha la organización que, no es nada abstracto o metafísico sino la suma de todos los individuos, con sus condicionamientos, fallos etc. Y, concretando más, el poder está en todas partes: está en las instituciones del Estado, está en nuestra empresa, está en la esfera de nuestras relaciones personales, familiares, sexuales, etc. Y está inevitablemente en nuestra organización de lucha. Por tanto, el sindicato es en alguna medida un frente más de la guerra al poder, que los anarquistas colocamos en la base de toda opresión, al contrario que otras sectas. El problema estará cuando la balanza de los esfuerzos caiga del lado de la lucha por los problemas internos y no de la lucha contra el sistema en general. Este debe ser motivo de constante reflexión.

Algunas causas de una situación

1-El modo en que se llevo a cabo la reconstrucción de la CNT. Se aceptó cargar con un exilio, con sus burocracias y enfrentamientos vidriosos. Si en la práctica éramos y somos una CNT renovada y mayoritariamente joven, se aceptó el lastre de un tinglado histórico y anquilosado, pensando que, en definitiva, se trataba de que no hubiera una ruptura que podia ser perjudicial y acabar de una vez con las viejas querellas admitiendo a todas las tendencias exiliadas, pero sabiendo que la CNT estaba aqui realmente. No fué así. Y no romper explicitamente con los tinglados del exilio ha supuesto una duplicidad organizativa y una fuente de querellas constantes: aqui se trabajaba y se hacia organización; alli se conspiraba, se movian hilos y peones. El planteamiento aparente del exilio fué: la CNT está en España y nosotros vamos a apoyarla etc. El plantearniento real fué: la CNT somos nosotros y la reconstrucción es obra nuestra (!) y de nuestros sellos, que pongan ellos la gente y nosotros pondremos el poder (todo porque no se "desvie"). Para esto se han valido de una especie de FAI (a estas alturas no se sabe muy bien en que consiste 6 cuantas hay), que ha perdido toda credibilidad anarquista al defender a ultranza un sindicalismo reivindicativo para reservarse el papel de vanguardia directiva.

Pues bien, de este defecto básico de la reconstrucción, que no hubiera costado arreglar poniendo las cosas en su sitio, derivan gran parte de los problemas actuales de ridicula manipulación y coacción, que están en la superficie de la situación actual. Es el lado más espectacular de los problemas, aunque insistimos, no el único, que está degastando las energias y la paciencia de muchos compañeros y frenando en gran medida la dinámica confederal.

2.-La falta de contenidos revolucionarios nuevos para el momento presente. Mucho más dificil de solucionar que el anterior, y del que todos tenemos la culpa por igual. La CNT no puede ofrecer el mensaje y la estrategia revolucionaria de hace 42 años. Desde el mismo momento de la reconstrucción debió abrirse un proceso de debate de nuevos planteamientos y tácticas que fueran cimentando una estrategia revolucionaria clara. Y esta es muchas veces la verdadera raiz de los problemas, que afecta a todos los militantes, incluidos los que no saben donde está Toulouse o pasan de problemas "orgánicos". Con el boicot de los sindicatos reformistas y del Estadopolicia, no se nos ocurre otra forma de quemar nuestras energias que perder convenios. Está claro, nuestra actuación nos sitúa ante los trabajadores como la única fuerza honrada y consecuente con lo que dice, pero con las manos vacías de alternativas.

3.-Falta de vida en los sindicatos. En esto se halla tambien más de una vez la raiz de los problemas. En la etapa anterior de la CNT (y repito que no hay nada que copiar sino simplemente constatar) sabemos que los sindicatos tenían sus bibliotecas, que eran centros de encuentro y debate... lo más fácil era que el recien llegado oyese hablar antes de astronomia, de los filósofos presocráticos o de la Escuela Moderna que de aumentos de sueldo (aunque todo esto daba solidez a los militantes para luchar con entrega personal y con solidaridad a toda prueba). Hoy, con un nivel de formación, 6 instrucción al menos, mayor y más generalizado hacemos de los locales sindicales un centro de recaudación de cuotas, donde uno va (si va) exclusivamente a reuniones oficiales con secretario y actas. Por aquí habria que incidir, y en esto todos tenemos que ver.

Se podria enumerar un montón de problemas parecidos pero estos creo que son los básicos de los que hay que partir para encontrar soluciones. Si es que creemos aún que hace falta una organización que combine práctica diaria y revolución total, contenidos libertarios 6 anarquicos profundos y movimiento obrero. Yo si lo pienso; mejor dicho, no veo otra alternativa diferente, ni creo que haya cambiado en lo fundamental la situación que nos movió a arrimar el hombro para poner la CNT de nuevo en pie.

A la hora de hablar de iniciativas practicas para ya, en orden a inciar la solución de todas estas cuestiones, me atreveria a apuntar algunos caminos, en base a mi experiencia personal de trabajo.

En primer lugar profundizar en la practica anarcosindicalista sobre necesarios planteamiento globales, en los que ha incidido una especie de polémica sin demasiado sentido (si de entrada se excluye la marginalización voluntaria o la "minoría selecta"). Es algo que ya está inventando hace muchos ,años para los libertarios. Desde mucho antes de fundarse la CNT, que, por cierto pasó a la clandestinidad al poco de fundarse por su lucha antimilitarista. Las reivindicaciones y el estudio de una pedagogia nueva y libertaria estaba presente en todos los congresos, la lucha antirrepresiva y la acción de solidaridad ha sido constante en toda la historia anarcosindicalista, sin olvidar, claro, la presencia en las luchas obreras con nuestros propios contenidos, que todo el mundo entienda y pueda asumir.

Unidad contra la burocracia

Junto a esto la unidad antiburocrática. Sin que se trate necesariamente de montar ningún tinglado que siempre es peligroso. Cualquier contacto con compañeros de nuestro sector de otras zonas ibéricas, cualquier reunión o encuentro casual nos reafirma en que es absolutamente mayoritaria la gente con ganas de trabajar de forma seria e innovadora. Son unos pocos los burócratas entre una gran mayoria de gente revolucionaria y autenticamente libertaria. Planteemos esa unidad antiburocrática fundamental que es el primer motivo de afinidad necesaria por encima de lo que nos pueda separar en cuanto a expectativas o procedencias teoricas. Una vez conseguida la normalización, abramos con urgencia el debate, sobre la base del respeto y el apoyo mutuos.

Una salida provisional, allá donde los problemas hayan adquirido una virulencia irreversible, es la autonomia al nivel donde esten las cosas claras. Local, sindicato, sección, comite de empresa 6 incluso a nivel individual, lo importante es el trabajo que hagamos y al nivel donde podamos hacerlo. Todo lo demás es secundario y forzosamente provisional. Claro que no se puede dejar de lado el secuestro de la organización por burocrátas allá donde se dé 6 los casos de injusticias contra compañeros. No hay que descansar hasta verlos solucionados. Pero sin que la situación nos domine y nos haga una pandilla de paranoicos. Sabiendo lo que va a quedar y servir y lo que es fruto de una situación, o de no haber abordado correctamente y a su tiempo los problemas.

El Congreso no se puede aplazar

Pero el paso fundamental para la solución de los problemas más graves no puede ser otro que un Congreso que no puede aplazarse más, y sobre el que toda la militancia debe presionar para que no se hable de aplazamientos o peregrinos "Congresos regionales previos". Un congreso de renovación que ya tenia que estar en marcha y que acabe con un statu-quo mal aceptado desde un principio del "siempre ha sido as¡", "la CNT es como es como si se quisiera hacer olvidar que en mucho menos tiempo que el transcurrido desde el último Congreso la
CNT cambió tres veces de forma de organización y puso al día sus formas de trabajo. Se trata de cambiar todo lo que haga falta sin falsos temores o ridiculas ortodoxias, "no es de libertarios asustarse de la innovación" escribía Malatesta a un militante valenciano en los años 20. Algunos cambios inaplazables irían en el camino de:

1º Poner la día las formas organizativas arrancar de las experiencias negativas y de la situación actual de la lucha, que den el máximo de eficacia y relacionen las luchas contra el poder en todos sus frentes y en una sociedad como la actual. Al mismo tiempo poner las vacunas necesarias a la burocratización y cortar las rémoras que se vienen arrastrando.

2º Avanzar una estrategia revolucionaria ampliando el campo y la aplicación de la acción directa. Que entre el momento presente de luchas sin salida y exitos escasos y esa mítica huelga general revolucionaria de no se sabe cuando, sepamos lo que hay que plantear o por donde vamos a pasar. Algo más que las frases y los slogans de rigor pero ya mas que vacios de contenidos reales y prácticos.

Será el momento de plantearse todas las rupturas que sean necesarias, y dejar claro y dejar claro que si (en nombre de falsas ortodoxias, o a base de manipulaciones) alguien quiere secuestrar las siglas para su uso particular, la organización (los trabajadores) rescatarán los contenidos y les darán una práctica, y eso es lo que importa.

Sabemos bien que en menos de cuarenta años desde 1870, el movimiento obrero libertario cambió cuatro veces de siglas.

Pero en todo caso, que se escindan ellos.

Anselmo (Valencia)

Revista Bocicleta,Año 1 Núm. 10
El primer numero de la revista libertaria Bicicleta, apareció el 1 de Noviembre de 1977 continuando algunos años mas. Se dice que los pueblos que desconocen su historia tienden a repetirla, no se si eso será cierto o no, lo que si creo es que puede ser muy interesante e instructivo conocer esta historia desde otro punto de vista que no sea el estatal.
Salud