Valencia: trabajadores de la Unión Europea sufren discriminación a la hora de acceder al mercado de trabajo

A partir del día 1 de enero de 2007, Bulgaria y Rumania pasaron a formar parte de la Unión Europea. Sin embargo, los ciudadanos de estos países que pretenden regularizar su situación laboral en la provincia de Valencia, tropiezan con enormes dificultades.

A pesar de que los políticos se reúnen con las principales autoridades que representan a los nuevos comunitarios, miles de trabajadores se encuentran esperando que se les conceda una cita en la Oficina de Extranjeros, para poder solicitar un Permiso que les permita trabajar sólo como autónomos, puesto que para el acceso al mercado de trabajo deberán esperar a que finalice el período transitorio de dos años o de lo contrario solicitar un visado en sus países de origen (trámite que puede durar un año).
A propósito, CGT-PV dio a conocer un Comunicado de Prensa manifestando que “considera injusta esta situación ya que, nuevamente, se pone de manifiesto que no se respetan los tratados como en el de la Comunidad Europea que considera ciudadanos de la Unión Europea a todas las personas que ostenten la nacionalidad de un Estado miembro (Art.17)”.
“Esta situación también refleja la discriminación a las personas en contraste con la libre circulación del capital sin limitaciones reguladas por medidas transitorias nacionales”.
“Además -agrega el Sindicato-, se agrava con el hecho de que para poder obtener un permiso de residencia deben esperar varios meses, ya que la administración continúa dándoles el trato de extranjeros.
Por último CGT-PV se solidariza con el personal de la Oficina de Extranjeros y reivindica “el aumento de plantilla”, ya que “personas en paro no faltarán para ocupar puestos en dicha oficina”.